Ducati: Una marca aspiracional en el mundo de las motos, con una fama que la precede y todo el encanto europeo que una japonesa rara vez alcanza. Sin embargo, nunca creí que esta marca fuera para mí; por mucho tiempo la de cariño la llamé “nuncati” por la baja probabilidad de que me animara a tener una. Era el 2008 y la marca pasaba por problemas de representación en Colombia y para acabar de ajustar, el referente más cercano que tenía era la Ducati Multistrada 1000DS del 2007 que al día de hoy recuerdo como una de las motos más feas del mundo; pero para gustos, colores. Por suerte la adquisición de Ducati por parte de Audi cambiaría dramáticamente el panorama de la marca a nivel global y por fin iniciaría una etapa de representación clara y responsable en Colombia.
La Scrambler de Ducati viene en 4 versiones, con la Icon (derecha) como la versión estandar. Lo mejor de esta moto es la fácil personalización que permite.
La nueva Multistrada se convirtió en una proeza tecnológica y creo la “Superbike de turismo”, desarrollando nuevas tecnologías como la suspensión dinámica o skyhook – y dejó de ser fea. La familia de superbikes 848 evo, 899 Panigale, la 1098, 1198, 1199 hasta la actual Panigale 1299 revolucionaron año tras año el mercado de motos y la hypermotard es posiblemente la moto más “juguetuda” del mercado. La familia de Monsters siguió creciendo y hasta se metieron en el negocio de las cruisers con la Diavel. Atrás los días de las Ducati con problemas de mecánicos y la llegada de la electrónica al mundo de las motos le dio a la marca un nuevo nivel. «¿Nuncati? Muévete BMW que hay una nueva niña linda en el barrio». Ducati se convirtió en un jugador serio en Colombia, sin embargo ninguna de estas motos era la adecuada para mí. Claro, ¿cómo no enamorarse de la Ducati 848 Evo color blanco perlado mate con rines rojos? o ¿quién no sería feliz haciendo wheelies en la hypermotard 848? Pero lo mío es ir a la oficina y moverme por la ciudad, o el turismo de larga distancia con un enfoque al off road.
La Scrambler trajo a mucha gente nueva a la marca, motociclistas de antaño, hipsters, y por suerte, mujeres.
El 2014 fue un año excelente para Ducati, jugándose el lanzamiento del año a una tendencia que crecía silenciosamente en el mundo; la época de lo retro moderno y la proliferación de la mal llamada moda “hipster”, les brindó el escenario perfecto para traer de vuelta uno de sus modelos más icónicos. La Ducati Scrambler. Originalmente la Scrambler fue lanzada al mercado en los 60’s y en ese entonces también fue un éxito. Hoy la Scrambler nace como una moto más orientada al life style de la marca que a sus cifras técnicas, a llegar a un público que se conecta emocionalmente con las creencias, filosofías y actitudes de las marcas que compran.
Cada vez son más las mujeres que se sienten atraidas por la libertad que solo las motos pueden brindar.
Ducati creo la moto “cool” de esta generación y en el proceso nos dio, a los usuarios, la oportunidad de tener una sexy italiana en nuestros garajes. La Scrambler es posiblemente, como en mi caso, la primera Ducati que muchas personas tendrán en su vida, y trajo al mercado de las motos, personas que nunca se habrían imaginado siquiera andar en una de ellas, y por suerte más mujeres. Marketing en su mejor expresión. Solo con ver la línea de accesorios adicionales para moto y piloto podrán ver porque la Scrambler marca una nueva era en el marketing de estilo de vida, Ducati ganó esta batalla al entrar en ella valientemente y sin reserva. Bravo Ducati.
Una posición espaciosa y erguida, para una moto de este estilo, cómoda para el piloto y cómoda para el parrillero.
Llevo alrededor de 3 meses con mi Scrambler, y aún me cuesta describirla. Como todas las Ducati, es una moto con mucha personalidad, mucho torque, y rápida. El acelerador puede resultar un poco brusco al principio, pero es más un tema de costumbre que un problema técnico. Es una moto espaciosa, cómoda y llena de detalles estéticos que a veces provocan más ganas de tomarle fotos que de montarla. El tanque, el logo, el display, el soporte de placa o los rines. Tomarle fotos no sería problema, solo si no fuera tan divertida montarla. Una moto más que capaz de meterte en problemas por ir rápido en las carreteras curveadas. Suficiente altura y unas llantas prácticas para situaciones de off road ligero. Una pureza tecnológica refrescante con su motor de 803cc y 75 hp refrigerados por aire, con la única asistencia de un ABS poco intrusivo. Una moto que da ganas de montar y montar, y que en la ciudad me ha ganado la mirada de muchos. En los casi 2.000 kms que ya llevo en ella son pocas las cosas por las que me puedo quejar, como los costos de accesorios, como direccionales Rizoma y un exhosto alto, o las piezas originales Ducati que la moto despertó en mí.
Mis trayectos al trabajo nunca habían sido tan divertidos.
Ducati ha creado no solo una espectacular moto y un nuevo estándar en la categoría, sino que ha encontrado la manera de entrar a los hogares de muchos motociclistas nuevos y de antaño. También creo un nuevo tipo de marketing que ha cambiado por completo la categoría, demostrando como los accesorios y piezas de estilo de vida pueden ser igual que importantes que el producto en sí. Sus competidores están tomando nota como BMW lanzando la Rnine T como su modelo retro personalizable al igual que Yamaha consolida su oferta con la clásica SR400, no disponible en Colombia, y la nueva XSR 700 derivada de la MT 07 que sigue la misma línea y filosofía.
La Scrambler no es ninguna perezosa y su torque es muy refrescante en esta categoría normalmente de motos relajadas.
Marcas como Speed and Strength y Shark han aprovechado las nuevas tendencias del mercado para crear colecciones retro, de apparel casual para la ciudad pero con materiales antiabrasivos y con protecciones para los motociclistas. Que mejor que una italiana para poder cerrar la brecha entre la moda y las motos?
Sobre la Moto:
Que chimbaaaaaaa…
Una sensación claramente viciada por las emociones que la moto brinda más allá de lo técnico. Una Ducati de corazón, para un público diferente que rejuveneció la marca y la puso en manos diferentes a hombres blancos de estratos altos. Parecen mucho más de 75hp. Una moto que envejecerá con muchos y se convertirá en una pieza de colección.